lunes, 27 de enero de 2014

Marcelino

Cerca del hostal había un Safeway. Había que subir una cuadra hasta avenida del parque y luego caminar unas tres o cuatro cuadras largas para llegar a un pequeño centro comercial con varios restaurancillos y tiendas y el Safeway al fondo. Yendo por esa ruta se me emparejo un paisano y empezó a hablarme como si lo hiciera para si.
- Estoy cansado.
Voltee y lo mire con empatía.
- Estoy cansado de andar todo el día caminando sin tener a donde ir.
Yo también estaba cansado de andar todo el día caminando sin tener a donde ir.
- Tengo cuatro días sin comer.
Yo tenia dos. Escucharlo me estrujaba el corazón, no por empatía o caridad, sino porque era como ver un video de mi mismo. Estaba a semanas de andar ambulando por las calles en el desahucio. Le pregunte su nombre.
- Marcelino. ¿Cómo se dice bad person?
- Mala persona.
- Yo no soy una mala persona. Yo tenia casa, esposa, carros, ahora solo tengo esto.
Y se agarraba la chaqueta. En la cartera solo traía dos billetes de veinte. Con veinte dolares, dependiendo de que comprara y la disciplina que tuviera, podía comer hasta cuatro días. Pero no podía negarme a ayudarme a mi mismo. Cavile pero me detuve y saque un de los billetes para dárselo. Las yemas de Marcelino ya acariciaban los veinte dolares cuando comento, no recuerdo las palabras, que iba a comprar cerveza y retire el billete. Estábamos como a una cuadra larga del centro comercial y en la esquina había una pizzeria con un anuncio de pizza grande por 5 dolares y a media cuadra un pequeño restaurante mexicano. Decidí compartir la pizza de 5 dolares con Marcelino y le dije que lo invitaba a comer. Ante el prospecto de comer pizza acelere el paso pero Marcelino me detuvo.
- No pudo caminar más rápido, me sangran los pies.
Ahí si me gano, a mi no me sangraban. Le mire los pies, traía un zapatos de tipo industrial que ya se empezaban a descocer pero la sangre no era evidente.  Me regrese y camine despacio al lado de Marcelino, quien repetía como una mantra su historia.
- ¿Cómo se dice bad person?

- Mala persona.
- Yo no soy una mala persona. Yo tenia casa, esposa, carros, ahora solo tengo esto.
Y se agarraba la chaqueta.
- anoche dormí ahí.
 Y señalaba la jardinera del edificio.
- ¿Cómo se dice bad person?

- Mala persona.
- Yo no soy una mala persona. Yo tenia casa, esposa, carros, ahora solo tengo esto.
Y se agarraba la chaqueta.
- anoche dormí ahí.
 Y señalaba la jardinera del edificio.
- Hoy en la mañana me encontré 30 dolares.
Me confeso con gusto
- Me levante temprano como a las siete. Estaba lloviendo.
- Eran dos billetes de 5 dolares y uno de 10. Estaban mojados. Me compre cerveza pero ya se me acabo.
- ¿Cómo se dice bad person?
- Mala persona.
- Yo no soy una mala persona. Yo tenia casa, esposa, carros, ahora solo tengo esto.
Y se agarraba la chaqueta.

Llegamos al local de Little Cesar's Pizza . Enfrente del mostrador había unas sillas pero no era un restaurante sino un punto de entrega de pizzas para llevar. Le pregunte a la dependiente si nos podíamos comer la pizza en las sillas y pedí el especial de pepperoni grande por cinco dolares y dos refrescos.

Cuando me entregaron la pizza, partí un pedazo para mi y otro para Marcelino. Tenia mucha hambre y la pizza se veía bien. Cuando Marcelino probo su pedazo soltó una interjección de gusto y alivio que me dejo sin aliento.
-Aaahhhhh....
Me quede sin hambre y con esfuerzo me pude comer el pedazo que había tomado. Me sentí enclaustrado y queria salir corriendo y huir. Le di la pizza a Marcelino y me pare.
- ¡Todo eso! ¿Para mi?
Con los treinta dolares que me quedaban le podía pagar un par de días en el hostal pero la mezquindad me ganaba y no quería andar cargando otro desahuciado, ¡si no podía con uno! Sabría dios cuando iba a conseguir trabajo. Al salir del local,  Marcelino me dijo
- La próxima yo la pago.
- Claro, la próxima tu la pagas
- Muchas gracias.

Me acorde de un cuento ruso que le leí a Mirei el día que me fui.  Regresa el padre con una bolsa de duraznos que reparte entre sus hijos y al final de la jornada,  les pregunta que les parecieron...
- Y tú, Volodia, ¿Qué te pareció el durazno? ¿Te gusto?
- No lo probé...
- ¿Porqué? 
- Es que fui a ver a Grisha para mostrarle el durazno y compartirlo con él. Lo miraba pero no acepto que lo compartiera con él. Así que cuando se descuido, lo deje como si se me hubiera olvidado y me fui...
 Grisha estaba muy enfermo y no podía salir de su cuarto. Tijón sonrió, acaricio la cabeza del niño, y le dijo
- Dios te lo devolverá.

Quisiera ser Volodia, que mi padre me mirara con orgullo y me dijera que un dios me esta cuidando, pero mi padre esta muerto y los treinta dolares se quedaron en mi cartera.

Imágenes y tropos

«...contra la desafortunada confusión entre símbolo y alegoría. La alegoría es una representación más o menos artificial de generalidades y abstracciones perfectamente cognoscibles y expresables por otras vías. El símbolo es la única expresión posible de lo simbolizado, es decir, del significado con aquello que simboliza. Nunca se descifra por completo. La percepción simbólica opera una transmutación de los datos inmediatos (sensible,literales), los vuelve transparentes. Sin esta transparencia resulta imposible pasar de un plano al otro. Recíprocamente sin una pluralidad de sentidos escalonados en perspectiva ascendente, la exégesis simbólica desparece, carente de función y de sentido».
Henri Corbin.




Imágenes literarias son los procedimientos que sirven para que el autor destaque el aspecto de la realidad que le impresiona. Estos procedimientos suelen ser:

  • La adjetivación. Los adjetivos y la naturaleza de los mismos cambian los efectos expresivos de una frase.
  • La comparación o símil. Son figuras lógicas.
  • Los tropos. Consisten en designar a las cosas, no por su nombre habitual, sino por otro en el que se refleje la visión personal del autor. Los Tropos más frecuentes son: la Metáfora, la Alegoría y el Símbolo. Pero existen además la Sinécdoque y la Metonimia. La sinécdoque es un tropo en el que se intercambian dos palabras, cuando la significación de una está comprendida en la de la otra. la metonimia está basada en una relación de causalidad o de sucesión, entre las dos palabras que se intercambian; es decir, que la una significa el origen o la causa de la otra.
La metáfora. es el tropo más común e importante. Consiste en substituir el nombre de una cosa por el de otra semejante en algún aspecto. La metáfora no es un simple ornamento estilístico, -sino una forma de expresión válida por sí misma. La metáfora difiere de la comparación en que ésta ofrece juntos el plano real y el evocado (sus dientes eran como perla); en cambio, la metáfora calla el tiempo real nombrando sólo el evocado (sus perlas).
Hay metáforas basadas en una semejanza del carácter sensorial; metáforas basadas en la semejanza de una realidad psicológica con algo material; metáforas basadas en la impresión que las cosas nos producen
La alegoría (del griego: αλλος, allos, "otro", and αγορευειν, agoreuein, "hablar en público") es una metáfora compleja, en la que cada elemento del plano real se corresponde con otro del plano evocado. Por lo general, el plano real es aquí una idea abstracta; en cambio, el plano evocado, es decir, el que nombramos en la alegoría, es siempre de carácter sensible, concreto, material.
La alegoría se considera una figura retorica, pero existen alegorías no verbales que se pueden encontrar en pinturas, esculturas, y otras formas de arte mimético o representativo. La alegoría como procedimiento retórico es un sistema extenso y subdividido de imágenes metafóricas que representa un pensamiento complejo o una experiencia humana real, y en ese sentido puede constituir obras enteras. Por ejemplo, el significado alegórico es uno de los que es posible extraerle a la Biblia según los teólogos.
La etimología de la palabra es más amplia que el uso común. Una alegoría es más elaborada que una metáfora, y se dirige hacia la imaginación, mientras que una analogía esta dirigida a la razón o la lógica. La fabula o parábola es una alegoría corta con moraleja. La alegoría como figura literaria o tema artístico pretende representar una idea abstracta valiéndose de formas humanas, animales o de objetos cotidianos. Por su carácter evocador, se empleó profusamente como recurso en temas religiosos y profanos. Fue usada desde la antigüedad, en la época del Egipto faraónico, la Antigua Grecia, Roma, la Edad Media o el Barroco.
Ya que es posible aplicar cualquier historia substancial a cuestiones de envergadura, algunas veces se distorsiona la intención del autor. Por ejemplo, algunos sugieren que The Lord of the Rings es una alegoría de las Guerras Mundiales, a pesar de que J. R. R. Tolkien lo ha negado enfáticamente:
"It is neither allegorical nor topical....I cordially dislike allegory in all
its manifestations, and always have done so since I grew old and wary enough to
detect its presence."
El símbolo representa, mediante una imagen sensible, una realidad o una experiencia abstracta - Dios, la eternidad... - que por su complejidad y carácter subjetivo no puede expresarse en términos claros y concretos.
Referencias
http://www.mallorcaweb.net/mostel/estilo3.htm
http://diccionario.babylon.com/allegory&tl=
http://en.wikipedia.org/wiki/Allegory
http://es.wikipedia.org/wiki/Alegor%C3%ADa

domingo, 26 de enero de 2014

Las frasecitas matonas del Facebook



Hay una superficialidad en cuanto a los mensajes que compartimos en las redes sociales. El problema raíz es que de necesidad son frases tomadas fuera de contexto y muchas veces su significado simplemente se pierde y queda solo una frasecita matona que suena bien, pero que ya no tiene un significado claro y especifico.  Sin embargo, más que una disonancia cognitiva, lo que hay aquí es una falta de atención a lo que se esta diciendo, o mejor dicho, es irrelevante lo que se dice, lo importante es estar en contacto con nuestro grupo virtual. Por dar algunos ejemplos, gente altamente competitiva y que educa a sus hijos en los valores de la competencia y el rendimiento, que le da like a mensajes sobre la importancia de dar preponderancia de la empatia sobre la competencia en la educación de los niños; o gente cuyo discurso es preponderantemente religioso que publica enunciados anti-religiosos; o, todavía mas curioso, gente que esta activa en Facebook 24x7 y que contesta a cualquier mensaje en segundos, que publica mensajes en contra de la tendencia general a que todos estemos enajenados en la virtualidad.

Me parece que de manera análoga a la interacción física entre individuos, donde la comunicación es 80% no verbal, en la interacción virtual, la parte textual es solo una fracción menor, a veces poco relevante. Lo importante es el tono y la continuidad del contacto con los demás.

El mundo virtual es superior al real en que permite interactuar con mas gente de manera continua y con satisfactores inmediatos y claramente definidos. Recuerdo una experiencia personal que ilustra el lado obscuro de la virtualidad. Cuando mi hija tendría unos 9 años, en al escuela participo en un proyecto grupal en el que tenia que ir a casa de un compañero para registrar en una bitácora el comportamiento de un hámster. Al terminar el proyecto mi hija empezó a insistir que quería un hámster. Yo estaba en contra pero finalmente cedí y le compre uno. Desafortunadamente para el hámster, al mismo tiempo alguien le dio a mi hija un Tamagotchi (たまごっち), una mascota virtual creada en 1996 por Aki Maita. El Tamagotchi es un aparato electrónico con la forma y el tamaño de huevo que tiene una pantalla en blanco y negro pixelada, donde se puede ver a la mascota virtual.

El caso fue, que mientras el hámster que le compre a mi hija, se la pasaba sin agua y comida, mi hija se dedicaba todo el día a cuidar virtualmente al Tamagochi, alimentándolo y dándole muestras de afecto. Un día en que quise darle agua al hámster, me encontré que ya no era mas que un trapo disecado. Claramente era mas sencillo y satisfactorio interactuar virtualmente con el Tamagotchi durante todo el día, que dedicar unos cuantos minutos diarios a limpiar la mierda y re-abastecer de agua y comida al hámster. Mientras que el hámster no daba muestra alguna de agradecimiento, o siquiera conciencia de que era atendido o desatendido, el Tamagochi proprocionaba retribución instantánea con corazoncitos y campanitas y mensajes de queja por falta de atención.

La participación en redes sociales no es lo mismo que jugar con un Tamagochi. A fin de cuentas, los usuarios o miembros son personas, con la mayoría de las cuales tenemos una relación real en nuestra vida cotidiana. Ademas, dichas redes proporcionan un canal alterno de información. En países donde los gobiernos y grupos de poder limitan o administran lo que el publico en general puede saber, ( la mayoría, pero por citar algunos: Estados Unidos, China, Irán, México), el acceso a las redes sociales es un recurso democratizador y de resistencia a abusos de poder. Por lo mismo, es importante poner atención y estar conscientes de lo que publicamos y con lo que aceptamos o promovemos.

La virtualidad es adictiva por su capacidad de proporcionar satisfactores emotivos de manera continua y patente, pero a costa de que se nos muera el hámster de manera real, definitiva, e irremediable. A la vida real no se le puede dar reset y el tiempo que le dediquemos a la virtualidad ya nunca lo podremos recobrar en la realidad. Como el vino, a la virtualidad hay que tomarla con moderación, y negar su abuso es un síntoma de adicción.